Aviso: este relato es un hecho real, lealo detenidamente, en caso de duda no consulte con nadie.
5-Julio-2003: El Viaje.
Despues de un año de intenso trabajo al fin llegaban las esperadas vacaciones. Nos esperaba un mes por delante de diversión y descanso, aunque eso era la teoría, porque la práctica fue terrorífica, si si, terrorífica. Era el comienzo de la partida hacia la costa abandonando Madrid. Semanas antes alquilamos un pequeño chalet en una cala de las costas gallegas. Nos esperaban 6 horas de viaje, viaje cargado de ilusiones, ganas de pasarlo bien y un descanso bien merecido.
6-Julio: Tras pasar la noche en un hotel de Pontevedra y despues de un buen desayuno para cargar las pilas nos dirigimos hacia el chalet. Apenas 2 horas despues llegabamos a la población de Portozás en A Coruña. El chalet se hallaba en una pequeña urbanización a 100 metros de la playa. El chalet era impresionante, todo lo que uno se puede imaginar lo tenía aquel chalet de reciente construcción. Tras dejar los equipajes decidimos celebrar el viaje bañándonos en aquella piscina. El agua estaba sucia pero no nos importó aquella situacion valía la pena. De ahí a un rato decidí poner en marcha la depuradora para mantener limpia aquella gigantesca piscina, pero algo fallaba porque no encendía. Llegué a la conclusión de que estaba atascado y efectivamente asi era, un chupete atascaba el mecanismo.
Llegada la noche decidimos ir a cenar fuera y a mirar el ambiente nocturno del pueblo. Serían las 3 de la madrugada cuando regresamos al chalet. Me quedé un rato en el coche yo solo mirando unos papeles, de ahí a un rato decidí entrar. Andando por el jardín sentí una brisa muy fría y un silencio sepulcral. Sentí unos pasos cerca de la piscina y allí me dirigí pensando que sería algún animal que entrara en el jardín. Estaba observando la piscina cuando observé a una niña vestida con un vestido blanco y un lazo rosa en su cabello negro cruzar sonriendo el jardín de una esquina a otra y desapareciendo entre unos arbustos que cercan el terreno. Sobresaltado me dirigía los arbustos para ver de donde había salido aquella niña. Rebusqué entre los arbustos pero no miré nada, era imposible que saliera del jardínsin que la mirara, los arbustos estaban pegados a un muro de unos 3 metros e altura, era imposible que una niña de 5 años saltara aquel muro. Entré en el chalet y no les comenté nada porque no les quería sobresaltar, pero sabía que algo pasaba, ¿quien era aquella niña? ¿qué hacía corriendo por el jardín?.
7-Julio: era una mañana especial, a pesar de que el pronóstico metéorológico auguraba un día de lluvia y tormentas, aquel día amanecía con un Sol brillante y un cielo despejado. Me levanté, me duché y me dispuse a desayunar cuando un grito espeluznante se escuchó en el chalet. Era el grito de mi mujer, salí corriendo por el jardín y estaba al al lado de la piscina, al observar la piscina entendí sus gritos, un gato flotaba muerto en el agua, no había muerto ahogado, el gato tenía la cabeza arrancada de cuajo. Le dije que se fuera para dentro que yo lo retiraría y lo enterraría en el jardín. Así fue, cogi una pala que había en un cubierto , hice un pequeño hollo y lo enterré. Otra vez más una serie d epreguntas rondaban mi cabeza, ¿porque estaba allí aquel gato?¿dónde estaba la cabeza?¿ qué inhumano pudo hacer algo asi?.
Pasamos el resto del día en la playa, era una playa muy tranquila, en todo el día nadie sea acercó por aquella cala.
8-Julio: Despues de levantarnos y desayunar decidimos ir al pueblo para comprar alimentos frescos. Realizamos las compras pertinentes y fuimos a tomar un café a un bar. Era un local antiguo presidido por un anciano que atendía a los pocos clientes que allí nos encontrabamos, solo mi mujer, yo y un chico que estaba en la barra con los ojos fijamente en un periódico local. Aguardamos un rato conversando hasta que una mujer irrumpió en el local nerviosa. Se dirigió al chico de la barra, lo cogió por un brazo arrancandolo del taburete y llevandolo fuera del local. Mientras pasaban por nuestro lado, le escuchamos decir al chico: " Alguén se encontra na Chaparrita" . Omitiendo aquella situación, nos levantamos, pagamos la consumición y nos marchamos para descansar un rato en el chalet. Al llegar observé algo en la pared de la entrada, tapado por unas ramas un azulejado en la pared mostraba el siguiente nombre: A Chaparrita. Me quedé frío, era la casa que se refería aquella señora, de nuevo otro grito salía de la casa, mi mujer llorando, nerviosa, salía por la puerta gritando, diciendo que la cabeza del gato estaba en el dormitorio, encima de la cama. Mientras la intentaba tranquilizar otra vez aquella niña volvió a aparecer sonriendo, y su vestido blanco estaba manchado de sagre, al verla nos quedamos aterrorizados, y aun mas al escuchar lo que nos preguntó: ¿habeis visto a mi gatito? salió corriendo de nuevo para detrás de la casa. Salí en su búsqueda pero otra vez aquella niña misteriosa había desaparecido de nuevo. Cansado de aquella situación me dirigí al chalet de al lado para preguntar que era lo que sucedía con aquella niña. Timbre varias veces, una anciana con la cabeza tapada con una pañoleta salió a la puerta. le pregunté si tenían una niña pequeña o si era de la zona. Su contestación fue rotunda: Acostumbrese a vivir con esa niña, ella se acostumbrará a ustedes. Cerró la puerta en mis narices. Decidí telefonear a la persona que nos alquilara aquel chalet pero sin éxito. Mi mujer se quería marchar, no estabamos dispuestos a pasar las vacaciones de esa manera. Llegó la noche, mi mujer se acostó. Seguí mirando la televisión en el salón. Desde el salón se miraba la piscina iluminada por unas luces. Mientras me estaba quedando un poco dormido mi mirada se desvió hacia la piscina, allí atónico observé como algo flotaba en el agua, seguí mirando má o menos cinco minutos hasta que la luz se apagó repentinamente. No sabía donde estaban los plomos ya que no conocía el chalet, encendí mi mechero y empecé a buscarlo, tenía los dedos quemados por el mechero hasta que se volvió a iluminar. Entonces miré algo que jamás olvidaré. La niña estaba en el medio de un chico y una chica, ésta tenía la cara morada e hinchada, el chico tenía la cara ensangrentada sin poder mirarle el rostro y la niña sonreía con unas carcajadas intensas. Empecé a correr y la chica me decía gritando ayudad a mi hija! ayudad a mi hija! ayudad a mi hija! las carcajadas de la niña me ensordecían. Subí a al habitación y desperté a mi mujer, cogi las cosas rápidamente y me marche, no le podía explicar lo que sucedía, solo quería acercarme al pueblo para dirigirme a la comisaría más cercana, y así fue. Mi mujer no comprendía nada, entré en la comisaría y explique lo sucedido. Sindarle ningun dato´del chalet, ni la zona ni nada soimplemente me dijo esto: es el chalet la chaparrita? nos dió un periódico y nos dijo que lo leyeramos detenidamente. Y así lo hicimos. Titular: Tragedia en portozás. Subtítulo: Una niña de 5 años y su madre aparecen muertas en una piscina de un complejo residencial. El oficial nos explicó que la niña se cayó a la piscina, la madre saltó en su ayuda y las dos se ahogaron. El marido al ver a su mujer y su hija ahogadas se disparó con una escopeta de caza en la boca cayendo en la piscina.
Estas fueron mis vacaciones, reales o irreales a si fueron, porque ya se sabe, meigas habelas hailas!
El Autor de este relato fué Zamburi%F1a , que lo escribió originalmente para la web https://www.relatoscortos.com/ver.php?ID=4369&cat=craneo (ahora offline)
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Aviso: este relato es un hecho real, lealo detenidamente, en caso de duda no consulte con nadie.
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2020-01-12
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